En el municipio de Socha el Ministerio Ambiente y Desarrollo Sostenible adelantó un diálogo social con las comunidades y los actores sociales de la región para buscar soluciones que permitan resolver de fondo las problemáticas socioambientales en jurisdicción del Páramo de Pisba; el evento fue presidió por la ministra Susana Muhamad y por el director de Corpoboyacá Hermán Amaya.
En el escenario se discutieron las acciones de control y seguimiento en pro de la protección del agua, los recursos naturales y la conflictividad asociada a la minería en el páramo; allí Muhamad dio a conocer los compromisos que asumió el Gobierno Nacional, “invito a la comunidad a hacer un pacto responsable para superar las diferencias entre defensores del agua y mineros, es claro que no se puede hacer minería en zonas de páramo, nos comprometimos a combatir la minería que se hace con rentas criminales, como se denunció en el marco del diálogo social”, referenció.
La Ministra planteó la urgencia de ordenar el territorio alrededor del agua y propuso analizar las conflictividades socio – ambientales municipio por municipio, “el objetivo es proteger el ciclo del agua, la tarea es gigantesca, el Páramo de Pisba es una prioridad, por eso aceptamos la mesa permanente de conflicto socioambiental para cuidar todos los derechos humanos. Empezaremos a trabajar municipio por municipio para detallar la realidad del territorio y así construir un pacto racional. Diagnosticaremos la situación minera y ambiental para aportar a la discusión; debemos aportar con la diversificación económica, teniendo en cuenta que Colombia debe estar preparada para cualquier cambio”, expresó Muhamad.
Por su parte el director de Corpoboyacá Hermán Amaya expuso que han cumplido con las labores de control y seguimiento ambiental, realizando más de 1.100 operativos, de los cuales 302 fueron en relación a la minería ilegal, y durante los cuales se ha logrado el cierre de 131 minas en Socha, Socotá, Jericó, La Uvita, Tasco y Chita, 61 bocaminas en zona de páramo en Socha, Socotá y Tasco, y 50 bocaminas en Socha y Socotá. Además de 56 medidas preventivas.
“Corpoboyacá cumple como autoridad ambiental, como los datos lo muestran, pero también es necesario retomar el Acuerdo Verde 1.0 y el nuevo Acuerdo Verde 2.0 junto a las comunidades mineras, esto para garantizar que las aguas residuales de la minería sean tratadas y así evitar que contaminen las fuentes hídricas”, describió Amaya. (Fin – Freddy Giovanny González Castro – UACP – URT)