Mientras que la Asociación de Productores de Esmeraldas Colombianas -APRECOL- impulsa esta iniciativa argumentando que requieren recobrar la fuerza en el mercado y con ello, las ganancias que deja la comercialización de ésta, principalmente en el exterior, los barequeros advierten que los únicos que se beneficiarán de esta situación son los grandes empresarios de esta piedra.
Según expresó Edwin Molina presidente de APRECOL, la intención de la asociación es ser los administradores de ese estatus de protección del producto “lo que nos da es la facultad de hacer cumplir un manual de uso técnico, la Superintendencia de Industria y Comercio es la garante de que ello se cumpla. Además, hay diferentes tipos de empresas vinculadas a nuestra asociación”
Y aunque aseguran que esta es la medida indicada para ejercer una protección del mineral y no algún tipo de dominio en la comercialización, los barequeros del Occidente de Boyacá no piensan lo mismo. Johana Cifuentes representante de los mineros de subsistencia dijo que la única intención es que a través de esta medida se logre incrementar los precios de venta de la esmeralda a nivel internacional, pero que las condiciones laborales de los guaqueros no tendrán la misma suerte.
La decisión sobre si se otorga o no esta Denominación de Origen es de la Superintendencia de Industria y Comercio, lo único que pide la comunidad es que sea tenida en cuenta ante estas medidas. (Fin – Érika Sánchez – UACP – URT)