Las guitarras artesanales de Chiquinquirá, un juguete que gana terreno en el mundo

A comienzos del siglo pasado, Chiquinquirá fue pionera en la elaboración de instrumentos de cuerda, reconocimiento y fama bien aprovechados por varias familias artesanas de la ciudad, quienes decidieron crear las populares guitarras de juguete o artesanales.

El colorido y bien elaborado juguete, una vez vio la luz en la primera mitad del siglo XX, comenzó a ganar terreno en los puestos de la reliquia, ubicados en el marco de la plaza de La Libertad, la calle 18, y el parque de la Concepción, siendo un atractivo para los miles de peregrinos que llegaban cada semana atraídos por el fervor religioso que despierta la Virgen del Rosario de Chiquinquirá.

En la Ciudad Mariana, hay cuatro familias que elaboran la guitarra artesanal, que, durante las últimas décadas, han encontrado mercado en diferentes ciudades del territorio colombiano, incluso, países de Centroamérica.

Es el caso de Luis Alejandro Páez, quien desde hace 28 años comenzó junto con su familia a elaborar guitarras de juguete en un pequeño taller ubicado en el barrio Jardín del Norte para abastecer el mercado local. En la actualidad elaboran entre 30 a 40 docenas al mes, para abastecer la demanda de ciudades como Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga y Cúcuta, entre otras; además exporta a Puerto Rico, República Dominicana y Aruba.

“Conmigo trabajan cuatro personas, bendito Dios hemos salido adelante, iniciamos con un taller pequeñito y hasta la presente tenemos un taller grande, ya tenemos buena maquinaria y todo se ha ampliado más”, relató el artesano.

La madera que se emplea para su elaboración es procedente de municipios del Occidente de Boyacá, como Muzo y Maripí, la cual cuenta con las propiedades necesarias para dar la forma a las pequeñas guitarras, decoradas con múltiples figuras y colores y las infaltables cuerdas de nilón. (Fin – Francisco Cuervo – UACP – URT)

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