Aunque ya abrió sus puertas desde el viernes 29 de marzo, el evento oficial será el 3 de abril con presencia del Ministro de Salud, quien acompañará este hecho histórico para la provincia de Ricaurte.
Fueron casi cuatro décadas las que tuvieron que esperar los habitantes de los municipios de la zona, para ver totalmente terminado y dotado este hospital de segundo nivel que se salvó de convertirse en elefante blanco gracias a la gestión del actual Gobierno departamental.
“Esta casa de 85 años debió haber estado cerrada hace tiempo porque amenazaba ruina; hoy por fin cerramos un capítulo de olvido”, dijo el Gobernador Carlos Amaya, quien asistió el viernes al traslado de pacientes desde la antigua a la nueva sede del hospital.
Fueron cerca de 20 pacientes quienes llegaron a bordo de ambulancias y los primeros en disfrutar de las modernas instalaciones dotadas con equipos de última tecnología.
El mandatario de los boyacenses, Carlos Amaya fue el encargado de cerrar las puertas de la sede antigua con un candado, símbolo de la culminación de una etapa gris no solo para la provincia de Ricaurte sino para la de Vélez, en Santander, que era atendida en esa vieja y deteriorada infraestructura.
“El Gobierno departamental fue trascendental. También tuvimos donaciones de hasta casi $450 millones en computadores, señalización, sillas, cortinas, escritorios que difícilmente hubieran salido de las finanzas del hospital que hoy solo ha tenido que gastar dos millones y medio de pesos”, mencionó la gerente Yaneth Manrique.
Así pues, desde ese mismo viernes en la noche se empezaron a prestar servicios de urgencias y desde este lunes 1 de abril, todos los servicios de consulta externa.
“Esta obra es de gran importancia para el bajo Ricaurte, todos los pacientes debían esperar para que les asignaran una cama y les prestaran los servicios; será un alivio muy grande”, dijo Jorge Hurtado León, alcalde de Chitaraque.
La inauguración oficial será este miércoles 3 de abril, y se espera que el Ministro de Salud Juan Pablo Uribe acompañe la fiesta que se armará en Moniquirá por el recibo de la nueva infraestructura.